Photoespaña 07: El Dedo en la llaga, Andres Serrano en el Circulo de Bellas Artes

De todos los artistas que trabajan en el panorama del arte contemporáneo, algunos siempre nos llaman la atención más que otros. No es ya por su calidad, contrastada o no, sino por una afinidad que nos hace sentirnos cercanos a su trabajo, o a sus ideas, o a su forma de ver el mundo. En mi caso no son pocos los artistas que me llaman la atención, pero la fotografía de Andrés Serrano da ese pasito adicional, consigue cautivarme de una forma que muy pocos artistas consiguen, y menos aun en fotografía. Solo unos pocos, como Andreas Gursky, Mariko Mori y cinco o seis más, consiguen impresionarme tanto, y empatizar tanto conmigo, no ya como aficionado al mundo del arte, sino como persona y como ser humano.

Así que debo decir que para mí es un auténtico privilegio poder ver en directo una exposición de una calidad tan alta como la que acoge el Círculo de Bellas Artes de Madrid con motivo de la celebración de Photoespaña 07. Y no solo la exposición, sino la clase magistral que el propio autor dio en la sala Alcalá 31 de Madrid el Martes pasado. Es una maravilla poder ver arte de un nivel tan alto, y es lo que hace que vivir en Madrid sea una experiencia tan especial.

Andrés Serrano es un artista. Él se autodenomina artista, y no fotógrafo. Su lenguaje visual es propio de la pintura, recordándonos constantemente a los pintores barrocos. Rembrandt, Caravaggio, etc. Su iconografía e iconología se centran en lo más primitivo del ser humano: Los "fluidos" (sangre, orina, semen), la muerte (a través de los iconos de la iglesia), el sexo (a través de... bueno, de eso), las diferencias raciales...

En cada una de sus series de fotografías investiga distintos estilos visuales, a través de los elementos icónicos antes mencionados. Comienza su andadura con la serie de fotografía abstracta basada en los fluidos, imágenes elegantes y muy limpias. En la clase magistral, serrano explica que él quería ser el primer "monochrome" de fotografía. Una imagen roja (sangre) otra amarilla (orina) y otra blanca ("milk", según Serrano, es decir, semen). Su siguiente serie, "Church" (iglesia) se encuentra con la primera en obras como "Piss Christ" (Jesucristo en Orina) que fueron todo un escándalo en su momento. Pese a lo que puede parecer, Serrano no pretende simplemente escandalizar. Es una evolución lógica según la forma de pensar postmoderna. Mezcla las dos series de una forma "química". Lo mismo ocurre en sus siguientes series. Nómadas, donde retrata a la gente de la calle intentando "darles una dignidad que hace tiempo que no tienen". "Una historia del sexo", con diferentes, e inusuales, visiones sobre la sexualidad, desde una mujer enana, o una anciana, que posan de una forma muy natural. Budapest, The Clan, The Church o Interpretation of Dreams, son otras de sus series. La que personalmente más me ha impactado se llama "La Morgue˝. El artista consigue que le dejen fotografiar a los cadáveres de la morgue de New York. Las imágenes son exquisitas, tremendamente elegantes. El título de las obras, básico para comprender lo que estamos viendo (esto es algo básico para comprender la obra de este autor), nos indica el motivo de la muerte. "Meningitis", la obra que más me ha impactado de Serrano, nos muestra un niño que parece dormido. Pero que en realidad murió de esa enfermedad. Sin duda un ejercicio elegante, sincero, y que demuestra la altísima calidad del trabajo de Serrano. Su última serie hasta ahora se llama "América". El autor fotografía diferentes personas como respuesta al atentado del 11-S, dando a entender que América es un pais en el que todas las culturas se mezclan entre sí. No hay un enemigo, esa es una visión errónea, que además nos sirve para ver que Serrano es un autor social, que antepone lo humano a todo lo demás. Actualmente no trabaja en ninguna serie, si bien está pensando en empezar una. Para mí fue una suerte poder conocerle.

Al final de la clase magistral tuve ocasión de hablar con el, y ante mi pregunta de si era religioso, me respondió que si, que mucho. Tras darle la mano, pude reflexionar sobre lo importante que es saber lo que estamos viendo, antes de valorarlo. Para todo el que pueda que no se la pierda, de verdad, es una exposición realmente buena. Reconozco que la compañía que tuve la hizo una experiencia todavía más especial, es una suerte poder ver arte con personas que pueden compartir algo así en toda su magnitud. Pues eso. Os dejo algunas imágenes para que las disfrutéis, espero que os

guste tanto como a mí! Un abrazo a todos!